miércoles, 27 de marzo de 2024

La entrada de Cristo en Bruselas

La entrada de Cristo en Bruselas

1888 Laca con una base de óleo sobre tela. 252.5 x 430.5.cm Museo J. Paul Getty, Los Angeles.

James Ensor nació en Ostende, Bélgica, en 1860. Desde muy joven, mostró gran aptitud para el arte y fue alumno de diversos artistas locales, antes de matricularse en 1877 como estudiante de pintura en la Academia Real de Bellas Artes de Bruselas. A partir de 1883, expuso con Los Veinte, aunque su relación con el grupo (que incluia figuras fundamentales como Fernand Khnopff y Théo van Rysselberghe) nunca fue del todo fluida. Su predisposición natural era la del «marginado y, tras la disolución de Los Veinte en 1893, fue aislándose de los demás. Vivió y trabajó durante el resto de su vida en su Ostende natal, donde también murió en 1949

La entrada de Cristo en Bruselas en 1889 es una de las pinturas más relevantes de Ensor. El artista realizó esta obra temprana cuando solo tenía veintiocho años y, tras concluirla, la guardó enrollada hasta 1929, año en que se expuso al público. El tema no era nuevo. Cuatro años antes, Ensor ya había realizado un dibujo de gran formato, montado en una tela y al estilo de Rembrandt, titulado La entrada de Cristo en Jerusalén

La composición también estaba situada en una calle abarrotada de gente y engalanada con estandartes en los que se leían lemas de carácter politico. Montada en un burro, la figura de Cristo (que es el mismo Ensor) se destaca sobre una cegadora exhalación de luz que aparece en el centro del cuadro. En La entrada de Cristo en Bruselas en 1889 no existe una explosión de luz, pero la cabeza del pintor (a la izquierda del cuadro) aparece transfigurada por un halo doble de absurdo tamaño. En ambas obras Ensor se muestra provocativo. No fue un hombre religioso, al contrario, se declaró ateo. Por eso, su recurso a los temas biblicos era metafórico. En esta ocasión, al caracterizarse a si mismo como el salvador del arte belga y la cultura popular también se alinea con las fuerzas sociales y politicas progresistas. Disfrazado de Cristo, Ensor bendice una riada carnavalesca de rostros toscamente enmascarados guiada por dignatarios de los ámbitos militar, eclesial y estatal. La procesión avanza bajo una bandera que porta la frase Fanfares Doctrinaires Toujours Réussies La parte superior del cuadro aparece enmarcada por una pancarta en rojo sangre que incita al progreso social: Vive la Sociale

Una nueva categoría de lo plano 

Cuando Ensor pintaba La entrada de

Cristo en Bruselas en 1889 trabajaba en una pequeña habitación de la casa paterna de Ostende que había reconvertido en estudio. Con más de cuatro metros de ancho, la tela era demasiado grande para ese espacio y al pintor le resultaba imposible trabajar en ella e incluso ver la composición en su totalidad. Por eso se vio obligado a pintarla en secciones verticales y a enrollar la parte concluida a medida que iba avanzando. Parece ser que nadie, ni siquiera él mismo, pudo ver adecuadamente la obra hasta que treinta años después la desplegaron para ser expuesta. La prueba visual del infrecuente método de trabajo de Ensor se advierte en que la obra concluida presenta un aplanamiento radical del espacio pictórico. Aunque las personas y los objetos van empequeñeciéndose a medida que se alejan, colectivamente se erigen como bastidores pintados de un teatro. El cuadro fue concebido el mismo año que se realizó otra obra innovadora espacialmente, Café nocturno, de Van Gogh, aunque en este caso el pintor holandés emplea lo que se convertiría en el clásico recurso expresionista de la perspectiva forzada, mientras que Ensor repliega el espacio hacia el interior a partir de los márgenes del cuadro. No volvería a verse nada igual hasta la aparición de los pintores abstractos de la tardia Escuela de París, en concreto Mortensen y Riopelle. 

La entrada de Cristo en Jerusalén, 1885.

Lápiz negro y marrón sobre papel montado en una tabla. 206 x 150 cm.

Museo de Bellas Artes. Gante

James Ensor

La vive et Rayonnante : L'entrée du Christ à Jérusalem, 1885

Gand, Museum voor Schone Kunsten


https://www.musee-orsay.fr/es/agenda/exposiciones/presentacion/james-ensor

Brita al piano

Brita al piano

Carl Larsson 1908

lápiz, carboncillo y acuarela sobre papel

97 x 63 cm

colección particular

#1001pinturas 

609

Este es uno de los cuadros de Carl Larsson (1853-1919) sobre la vida hogareña rural en Sundbom que le convirtieron en el artista sueco más popular. Plasma a su hijita Brita, uno de los siete hijos de Larsson que aparecía con regularidad en los cuadros de su padre disfrutando de todo tipo de actividades. Larsson es famoso especialmente por sus acuarelas. Le gustaban los tonos frescos y uniformes que estas proporcionaban en comparación con los óleos, y este cuadro está compuesto de diversas zonas de colores bidimensionales. Como muchos artistas europeos de su tiempo, era un gran admirador de los grabados japoneses. Esta imagen posee objetos muy perfilados, con la pata del piano y el atril plasmados de forma muy decorativa. La extraña composición presenta un objeto grande cortado en primer plano (el piano) y un personaje (Brita) casi oculto. Todas estas características son reflejo de los grabados japoneses que circulaban en aquella época. Tipico del estilo que aplicaba a sus acuarelas, aunque tal vez con un poco más de luces y sombras, posee la cualidad de un libro de ilustraciones. Larsson habia trabajado de ilustrador y admiraba la obra de varios ilustradores de libros contemporáneos. Lo que creo fue un sencillo arte decorativo sueco, enriquecido con diversas influencias europeas y orientales. Aunque el espectador solo puede ver un rincón de la sala, está claro que la decoración es sencilla, luminosa y no recargada. Larsson y su esposa Karin diseñaron o fabricaron todos los objetos de su casa. Entre otros talentos artisticos, Karin fue una diseñadora de telas y tejedora muy competente, que fabricaba sus propios artículos textiles. 

lunes, 25 de marzo de 2024

Molino al sol

 

Molino al sol

Piet Mondrian 1908 

óleo sobre lienzo 114 x 87 cm

Haags Gemeentemuseum, La Haya

#1001pinturas

608

Si bien es más conocido en la actualidad como artista abstracto, Piet Mondrian (1872-1994) abordó al principio un amplio abanico de estilos, convencido de que el tema de un cuadro era tan importante como la forma de pintarlo. Mondrian afirmaba que la función del arte era trazar una visión del mundo clara, y fue esta idea la que le condujo al final a suprimir de su obra cualquier ilusión de espacio pictórico en favor de un modo de composición más apropiado para la superficie bidimensional del lienzo. Incluso en sus primeros paisajes (competentes imitaciones de la obra temperamental e impresionista de sus colegas compatriotas) Mondrian expresaba la necesidad de crear un entorno que fuera puro y completo en su belleza. En la plasmación de molinos, iglesias y dunas, ejecutada 

con un estilo luminista de colores brillantes, Mondrian dedicó gran atención al juego de la luz natural sobre los objetos. Molino al sol, tal vez el mejor cuadro de este estilo, encuentra su inspiración más inmediata en los cuadros fauvistas de Henri Matisse y André Derain. Ya observamos a Mondrian combinando geometrías abstractas con bloques de color sin adulterar Sin embargo, no hay nada más erróneo que pensar en Mondrian como en un formalista objetivo en busca de armonías decorativas Las sentidas convicciones utópicas que le condujeron a la abstracción se basaban en la visión platónica de la realidad, en la creencia de que cuanto nos rodea es un mero reflejo de una verdad más profunda, y esa visión está a punto de concretarse en cuadros como Molino al sol.

martes, 19 de marzo de 2024

Botellas y frutero

Botellas y frutero

Giorgio Morandi 1916
óleo sobre lienzo 60 x 54cm
Peggy Guggenheim Collection
Venecia

#1001pinturas
659

Aunque el nombre de Giorgio Morandi (1890-1964) se asocia con el género del bodegón, sus orígenes artísticos no estaban enraizados en el mundo observable, sino en lo que podría describirse con alguna licencia como arte metafísico. Lo intrigante de Botellas y frutero reside en que la tendencia a infundir cierto aire de extrañeza a un grupo de objetos no del todo definidos se une a un compromiso más directo con lo cotidiano. Nada nos impide dar una interpretación antropomórfica de estos tres objetos situados en un espacio indeterminado, viéndolos como figuras que pueblan un paisaje poco definido. Morandi se concentró cada vez más en una gama reducida de objetos de modestas dimensiones (sobre todo botellas y otros recipientes) que pintaba precisamente porque siempre aparecían como lo que eran, cosas inertes y banales, sin significado. El pintor usó las convenciones del bodegón como un modo de destilar y armonizar determinados aspectos del mundo concreto. Botellas y frutero permite asomarse a los entresijos de la sensibilidad del artista, tanto en el ímpetu original de su creatividad como en el posterior refinamiento de la obra.

viernes, 15 de marzo de 2024

Caminante sobre un mar de niebla

Caminante sobre un mar de niebla Caspar David Friedrich 1818

óleo sobre lienzo 98,5 x 75 cm Hamburger Kunsthalle, Hamburgo

#1001pinturas 

373

El sublime poder de la naturaleza fue un tema dominante en las pinturas de Caspar David Friedrich (1774-1840). El paisaje de su Alemania natal fue una fuente de Inspiración para el artista, pero su historia personal también podría explicar la tensión que supo plasmar. Cuando era un chiquillo, patinaba con su hermano sobre la superficie helada del mar Báltico cuando el hielo se resquebrajó. Caspar resbaló dentro y su hermano murió por salvarlo. La depresión que el artista padeció de adulto le llevó a intentar cortarse el cuello, sin éxito. La relación existente entre el trauma y la inspiración queda clara en la afirmación de Friedrich: «El artista no deberia pintar solo lo que tiene delante, sino también lo que ve en su interior. Y si no ve nada, tendría que dejar de pintar lo que tiene delante».

Un mar embravecido se estrella frente a la solitaria figura de Caminante sobre un mar de niebla. Este cuadro, que el artista realizó el mismo año de su boda, podría expresar la lucha personal que sostuvo para dominar sus emociones encontradas y tranquilizar a su joven desposada. Friedrich, quien empezó a pintar al óleo a partir de los treinta años, demuestra haber poseido un profundo conocimiento del medio en los ricos matices del color oscuro al que recurre para plasmar una imaginería desgarradora. Los acontecimientos tergiversaron el legado de Friedrich cuando Adolf Hitler decidió apropiarse de una de sus pinturas y emplearla como propaganda nazi. Sin embargo, a pesar de la anacrónica conexión, la belleza mística y melancólica de sus paisajes ha perdurado hasta nuestros dias. 

Bosque de árboles jóvenes, flores de ciruelo

Bosque de árboles jóvenes, flores de ciruelo

Clifton Pugh 1984

óleo sobre lienzo |

91,4 x 111,7 cm

colección particular

#1001pinturas 

938

Nacido en Victoria, Australia, Clifton Pugh (1924- 1990) fue enviado a Papúa Nueva Guinea como dibujante del Servicio de Inteligencia Militar durante la Segunda Guerra Mundial. En 1947 se inscribió en la National Gallery of Victoria Art School, donde destacó por la calidad de su trabajo y por su sintonía con el mundo natural. La belleza sencilla de Bosque de árboles jóvenes, flores de ciruelo tiene dejes del arte japonés. Ensalza el mundo natural en todas sus formas con la rama puntiaguda muerta del árbol del primer plano, que emula la forma de la cabeza de un pájaro. El estilizado crecimiento de los árboles jóvenes contrasta a la perfección con la madera más vieja y nudosa, que evocan el ciclo de la vida y la perdurable belleza de la naturaleza. Su primera exposición individual en 1957 le granjeó el clamor de la critica. A partir de aquel momento, Pugh se convirtió en uno de los artistas más populares de Australia y se aprovechó de ello para desempeñar una función destacada en el mundo político. Partidario incondicional del Partido Laborista Australiano, pintó seductores retratos de sus figuras destacadas, como su aclamado retrato de Gough Whitlam de 1972. En 1953 Pugh fue miembro fundador de la Dunmoochin Artists Society, una agrupación de artistas que valoraba la belleza del paisaje de Victoria, donde vivian. Poco antes de su muerte, Pugh contribuyó a preservar el futuro de la zona creando la Fundación Dunmoochin, una institución benéfica dedicada a la conservación del medio ambiente. 

lunes, 11 de marzo de 2024

El templo de Isis y Osiris

El templo de Isis y Osiris

Karl Friedrich Schinkel 1816

pintura para la escenografia de una ópera

Staatliche Museen, Berlin

#1001pinturas 

372

Karl Friedrich Schinkel (1781-1841), arquitecto y pintor prusiano, diseñó algunos de los proyectos arquitectónicos más emblemáticos de Berlín. Nacido en Brandeburgo y alumno de Friedrich Gilly en Berlin, Schinkel decidió en la exposición de Berlín de 1810 que nunca sería un maestro en el arte de la pintura y se volcó en la arquitectura. A lo largo de su vida, creó la Neue Wache, la Schauspielhaus en el Gendarmenmarkt y el Altes Museum Destacado impulsor de la recuperación de lo clásico, Schinkel adoptó un depurado estilo teutónico, basado en el léxico de las antiguas mitología y arquitectura griegas. El templo de Isis y Osiris donde Sarastro fue sumo sacerdote es el telón de fondo para la escena final de La flauta mágica, de Wolfgang Amadeus Mo- zart. En la ópera, Sarastro, el sabio sacerdote de Isis y de Osiris, rey del mundo subterráneo, libera a Pamina de la influencia de la Reina de la Noche. Tanto Schikaneder, que escribió el libreto original, como Mozart y Schinkel fueron francomasones. Las ideas que se postulan en la ópera son masonas en su contenido y reflejan motivos de la llustración: Sarastro simboliza al soberano que gobierna con la razón, la sabiduría y una iluminada introspección hasta vencer a la oscuridad irracional. Las fieras que aparecen en las columnas como protectoras del mundo subterráneo son una variación innovadora de los templos griegos que Schinkel solía emplear en sus otros diseños arquitectónicos. En esta pintura, perteneciente a la última escena, la arquitectura domina un cielo eléctrico, toda vez que representa la justicia y el orden del preclaro espíritu griego.

domingo, 10 de marzo de 2024

Oscar Premio a la mejor Pelicula 1927/2022

Oscar Premio a la mejor Pelicula 2023
Oppenheimer

Oscar Premio a la mejor Pelicula 2022
Everything Everywhere All at Once
Todo a la vez en todas parte

Oscar Premio a la mejor Pelicula
2021: Coda

2020: Nomadland

Década de 2010

                         2019: Parasitos

2018: Green Book 
Oscar a la Mejor pelicual 2018
2017: La forma del agua 
Cartel Pelicula Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2015:  La forma del agua
2016: Moonlight 
Cartel Pelicula Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2016: Moonlight
2015: Spotlight 
Cartel Pelicula Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2015: Spotlight
2014: Birdman 
Cartel Pelicula Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2014: Birdman
2013: 12 Years a Slave 
Cartel Pelicula Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2012: 12 años de esclavitud
2012: Argo 
Cartel Pelicula Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2012 ARGO
2011: The Artist 
2010: The King's Speech

Década de 2000
Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 2000/11
2007: No Country for Old Men 
2006: The Departed 
2005: Crash 
2004: Million Dollar Baby 
2003: El señor de los anillos: El retorno del rey 
2002: Chicago 
2001: A Beautiful Mind 
2000 : Gladiador

Década de 1990

Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 1988/99
1999: American Beauty 
1998: Shakespeare in Love 
1997: Titanic 
1996: The English Patient 
1995: Braveheart 
1994: Forrest Gump 
1993: Schindler's List 
1992: Unforgiven 
1991: El silencio de los corderos 
1990: Dances with Wolves

Década de 1980

Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 1976/87
1989: Conducir a Miss Daisy 
1988: Rain Man 
1987: El último emperador 
1986: Pelotón 
1985: Fuera de África 
1984: Amadeus 
1983: Términos de cariño 
1982: Gandhi 
1981: Carros de fuego 
1980: Gente común

Década de 1970

1979: Kramer vs. Kramer 
1978: The Deer Hunter 
1977: Annie Hall 
1976: Rocky 
1975: Alguien voló sobre el nido Cuckoos 
1974: El padrino Parte II 
1973: The Sting 
1972: El padrino 
1971: The French Connection 
1970: Patton
Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 1964/75

Década de 1960

1969: Midnight Cowboy 
1968: ¡Oliver! 
1967: En el calor de la noche 
1966: Un hombre para todas las estaciones 
1965: El sonido de la música 
1964: My Fair Lady 
1963: Tom Jones 
1962: Lawrence of Arabia 
1961: West Side Story 
1960: El apartamento
Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 1952/63

Década de 1950

1959: Ben-Hur 
1958: Gigi 
1957: El puente sobre el río Kwai 
1956: La vuelta al mundo en 80 días 
1955: Marty 
1954: En la orilla 
1953: De aquí a la eternidad 
1952: El mayor espectáculo sobre la tierra 
1951: Un estadounidense en París 
1950: Todo sobre Eva
Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 1940/51

Década de 1940

1949: Todos los hombres del rey 
1948: Hamlet 
1947: Acuerdo del caballero 
1946: Los mejores años de nuestras vidas 
1945: El fin de semana perdido 
1944: Going My Way 
1943: Casablanca 
1942: Mrs. Miniver 
1941: How Green Was My Valley 
1940: Rebecca

Década de 1930

Carteles Peliculas Ganadora del Oscar a la Mejor Pelicula 1927/39
1939: Lo que el viento se llevó 
1938: No se puede llevar con usted 
1937: La vida de Emile Zola 
1936: El gran Ziegfeld 
1935: Motín en el bounty 
1934: Sucedió una noche 
1932/33: Cavalcade 
1931/32: Grand Hotel 
1930/31: Cimarron

Década de 1920

1929/30: Toda tranquilidad en el frente occidental 
1928/29: Broadway Melody 
1927/28: Alas

Bonjour, monsieur Courbet

Bonjour, monsieur Courbet

Gustave Courbet 1854

óleo sobre lienzo 129 x 149 cm

Musée Fabre, Montpellier

#1001pinturas 

428

En la década de 1850, Gustave Courbet (1819-1877) era el artista más polémico de Francia. Rebelde declarado contra la sociedad burguesa, se lo veia como el lider de la escuela realista, y fue ridiculizado sin tregua por la supuesta vulgaridad y fealdad de sus cuadros. Tuvo la suerte de encontrar un cliente rico, Alfred Bruyas, que solucionó sus graves problemas económicos. En mayo de 1854, Courbet viajó al sur de Francia, a Montpellier, para pasar unos días con Bruyas. Fue en el transcurso de esta estancia cuando pintó El encuentro, popularmente llamado Bonjour, monsieur Courbet. La escena se desarrolla bajo un cielo soleado y luminoso. El efecto de los personajes, erguidos contra un paisaje de lo más banal, es de una monumentalidad extrañamente onírica Bruyas (pelirrojo) saluda ostentosamente con el sombrero. Está de pie, pero con la mirada baja, humilde. Tras él, su criado Calas inclina respetuosamente la cabeza. Breton, el perro de Bruyas, parece el único a quien no intimida la presen- cia del pintor. La postura de Courbet, con su mochila llena de utensilios de pintura, se basa en un grabado del Judío Errante, representación simbólica de la humanidad doliente. Recibe el sol de lleno y proyecta una sombra muy nítida, mientras que las figuras de Bruyas y su criado se ven atenuadas por la sombra. La arrogante inclinación de la cabeza del pintor, y lo prominente de su barba, indican que acepta la muestra de respeto como algo que se le debe. Aunque fuera clasificado como realista, en este cuadro Courbet formula rotundamente la visión romántica del artista como profeta y rebelde que se merece el homenaje de la humanidad  

Joven reclinada

 

Joven reclinada

François Boucher 1751 

óleo sobre lienzo 59,5 x 73,5 cm Wallraf-Richartz Museum, Colonia

#1001pinturas 

François Boucher (1703-1770) hizo dos versiones muy parecidas de este desnudo voluptuoso. La segunda, de 1752, es uno de sus cuadros más famosos. Estas obras, pintadas en plenitud de facultades, apuntalan su reputación como uno de los mejores artistas del rococó en Francia. Este estilo floreció en la corte de Luis XV, antes de la Revolución francesa. Abogaba por la elegancia y el refinamiento, pero también se caracterizaba por un gran desenfado y un sentido lúdico del erotismo. Los clientes de la nobleza adornaban sus paredes con correrias de ninfas y diosas. En respuesta a esta demanda, Boucher se volvió un experto en retratar el cuerpo femenino y realizó miles de esbozos de distintas modelos que usó repetidamente en sus composiciones de gran formato. Joven reclinada destaca entre casi todos sus desnudos por su carácter directo. En este himno a la sensualidad no hay ninguna pretensión de colocar a la modelo en un contexto mitológico o narrativo. El perfume embriagador de la rosa tirada en la alfombra apela al sentido del olfato, mientras las telas (terciopelos y sedas arrugados) evocan el del tacto. El ambiente general es de inocencia malcriada. Se suele identificar a la joven como Louise O'Murphy, hija de un zapatero irlandés que empezó a posar a los catorce años para huir de la pobreza de su entorno, y que en poco tiempo se hizo famosa por su belleza. Durante un tiempo fue una de las amantes de Luis XV. También conoció a Casanova, que en sus memorias la describe asi: «Blanca como un lirio y dotada de toda la belleza que podría otorgar la naturaleza o el arte de un pintor.

Cartel Oficial JJOO Paris 2024

 

Cartel Oficial JJOO Paris 2024

Autoría: Ugo Gattoni


 
París 2024 revela campaña de carteles para los Juegos Olímpicos y Paralímpicos

El artista parisino Ugo Gattoni ha ilustrado los carteles olímpicos y paralímpicos ricamente detallados, que se unen para crear un díptico por primera vez en la historia de los Juegos.

La imagen muestra un cartel horizontal ilustrado por Ugo Gattoni para los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 que muestra una versión costera de fantasía densa de París.

Mientras París se prepara para acoger dentro de unos meses los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024, el Comité Olímpico Internacional ha revelado los dos carteles oficiales ilustrados por el artista Ugo Gattoni, que ha trabajado anteriormente con marcas de lujo como Cartier y Hermès.

En el pasado, los carteles oficiales solían mostrar símbolos y logotipos asociados con los Juegos. Para París 2024, los carteles olímpicos y paralímpicos oficiales de Gattoni representan escenas animadas que están conectadas visualmente: el primer díptico en la historia de los Juegos. Los carteles de arte complementarios revelados el año pasado invitaban de manera similar a los artistas a crear dos diseños interconectados.

Gattoni dedicó más de 2.000 horas a los carteles, que están repletos de detalles al estilo de ¿Dónde está Wally? libros de rompecabezas. Se incluyen todos los eventos de los torneos y otros emblemas que hacen un guiño a los Juegos, como el logotipo de París 2024 y las mascotas Phryges.

Aunque en los carteles se pueden encontrar monumentos emblemáticos de París como la Torre Eiffel y el Gran Palacio, el paisaje urbano en sí se ha transformado en una escena de fantasía, con la notable adición de una masa de agua que lo flanquea.

Esto puede parecer inusual considerando que la capital está en el interior y, en muchos sentidos, es el resultado de la visión sobrenatural de Gattoni. Sin embargo, las secciones costeras de los carteles se basan en referencias específicas. Uno de ellos es Marsella, donde la antorcha olímpica llegará en barco antes de que el relevo llegue a París, y donde se celebrarán varios eventos. La ola en el mar representa a Tahití, que también acoge eventos durante los Juegos.

Mientras tanto. El canal que corre dentro de la arena es un guiño al río Sena, donde se llevará a cabo la Ceremonia de Apertura de París 2024, lo que marca la primera vez que el ritual se lleva a cabo fuera de un estadio.

Gattoni estima que las cifras individuales que se ven en los dos carteles suman decenas de miles, y no hay dos iguales. El jefe de diseño de París 2024, Joachim Roncin, subraya que quería involucrar a un artista en un proceso artesanal, con Gattoni dibujando cada línea individualmente en lugar de llenar las escenas con elementos de copiar y pegar. La elección de mostrar personas entremezcladas también fue una decisión consciente. “Ugo reunió a muchos deportistas y también a mucho público, por lo que ambos viven juntos”, explica Roncin.

La imagen muestra un cartel horizontal en blanco y negro ilustrado por Ugo Gattoni para los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 que muestra una versión costera de fantasía densa de París que la gente puede colorear en casa.

La composición fue la parte más desafiante del proceso, nos dice Gattoni. “Fue una dificultad importante. Luego cuando tuve todos los trazos y todo compuesto, fue un verdadero placer entrar con los colores y darle vida a este dibujo”. La paleta es brillante y variada, pero también contiene vínculos sutiles con la identidad del diseño de París 2024 , creando un puente entre la marca maestra y el arte promocional.

La pieza completa también se exhibirá temporalmente en el Museo de Orsay de París y, sin duda, aparecerá públicamente en el período previo a los torneos.

Los Juegos Olímpicos y Paralímpicos son un asunto serio para los atletas, pero los carteles de Gattoni son un recordatorio divertido de la alegría y la atmósfera febril que se respira cuando los Juegos están en la ciudad.

 

sábado, 9 de marzo de 2024

Carteles JJOO verano

Carteles JJOO verano 2024
 


Carteles JJOO verano 2020

Carteles JJOO verano 2016













Carteles JJOO verano 2012